El mandatario declaró en 2006 que tenía un patrimonio neto (Total bienes menos Total deudas) de Bs 779.423, mientras que el 25 de octubre de este año ese patrimonio subió a Bs 2.705.058.
Las deudas de Morales también se incrementaron, pero en una proporción mucho menor. El año que asumió la Presidencia del Estado por primera vez tenía deudas por Bs 210.884, mientras que en esta gestión sus pasivos llegan a Bs 316.358.
En total, todos sus bienes suman esta gestión más de tres millones de bolivianos, frente a los Bs 990.000 que tenía en enero de 2006.
Sobre sus ingresos o rentas, el jefe de Estado declaró en la Contraloría que percibía Bs 195.000 anualmente, monto que no varió desde 2006 hasta la fecha. Esta suma de dinero emerge del salario que percibe el presidente cada mes, de Bs 15.000, multiplicado por los 12 salarios que recibe anualmente más un aguinaldo.
Si se multiplica esos Bs 15.000 por los 88 meses de trabajo del presidente (12 meses y un aguinaldo por año) se llega a una suma de Bs 1.320.000 obtenidos en rentas desde enero de 2006 hasta octubre de 2012.
EL DEBER buscó a la ministra de Comunicación, Amanda Dávila, para consultarle sobre el incremento que registró el patrimonio del mandatario; ella mencionó que hablaría con el presidente y que si este la autorizaba respondería, pero luego no contestó el teléfono.
En todo caso, uno de los argumentos que se manejan en el oficialismo es que la primera autoridad gubernamental no tiene gastos fuertes que hacer, pues el Estado cubre su vivienda, alimentación y todos sus gastos cotidianos, por lo que gran parte de su salario se va al ahorro personal.
El jefe de bancada del MAS en el Senado, Eugenio Rojas, indicó que no es de extrañarse que el patrimonio del presidente se haya incrementado, porque la economía en general mejoró y que, por tanto, todos los bienes elevaron su valor.
“Han mejorado las condiciones de vida en Bolivia. A ver, preguntemos, hace 10 años han comprado una casita con Bs 10.000, hoy día cuesta Bs 100.000. Entonces, a esa persona no la podemos cuestionar por qué ha subido, sino que la economía del país está mejor, en ese sentido van a subir también los bienes de las autoridades o de cualquier otro ciudadano”, explicó.
El senador Julio Salazar, del sector cocalero (MAS), prefirió no opinar sobre el tema. “Vamos a averiguar y seguramente cuando tengamos el conocimiento vamos a decir nuestra opinión”, señaló.
A principios de año, investigaciones periodísticas revelaron que el patrimonio de 12 ministros del gabinete de Morales también se incrementó, mientras que de otros cuatro sufrió un descenso.
La Ley del Estatuto del Funcionario Público establece que funcionarios electos y designados, entre otros, deben presentar la declaración jurada de sus bienes y rentas ante la Contraloría General del Estado desde que comienzan a trabajar en la función pública.
La declaración debe realizarse de forma anual.
Tratamiento dental aleja al dignatario
El presidente Evo Morales decidió someterse, desde ayer y hasta el fin de semana, a un tratamiento dental, por lo que no participó de la reunión de gabinete ministerial extraordinaria que se realizó ayer en Palacio Quemado y que fue presidida por Álvaro García Linera, informó el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, según la ANF.
Por lo visto, la atención odontológica alejará al mandatario de otras actividades hasta el lunes, según refirió la autoridad ministerial.
“Nuestro presidente está recibiendo un tratamiento dental, aprovechando el feriado, el día de mañana, y el fin de semana. El presidente ha tomado la decisión de someterse al tratamiento dental, un tratamiento de conductos”, señaló el Ministro de la Presidencia, refiere la estatal ABI.
Según Quintana, la próxima semana el dignatario boliviano continuará con “una agenda muy activa que tiene, que está orientada a desarrollar un conjunto de entrega de obras, trabajo de la gestión del presidente”.
Desde el Gobierno no se precisó si el presidente se someterá al tratamiento odontológico en la sede de Gobierno o si tiene previsto trasladarse a otra ciudad o departamento para este efecto.
R. Otálora/M. Chuquimia / El Deber
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